"Vemos una racha de secuestros y de extravíos de menores, y la mayoría se produce porque los padres los dejan salir sin la compañía de un adulto o familiar, o les encomiendan acciones que no son propias de su edad", indicó. 

Jara manifestó que se deben evitar escenarios como lo sucedido con la niña Vayoleth, quien fue raptada en las puertas del hospital Loayza y más tarde encontrada por Olinda Ramírez en las inmediaciones del Mercado Modelo de Chimbote, "cuando se sabe que a un centro hospitalario no se puede llegar con menores de edad",.  

Refirió que su sector, a través de los promotores que laboran en los centros de emergencia mujer (CEM), los cuales suman 190 a nivel nacional, van casa por casa para informar los derechos de la mujer y de los niños, sobre el trato igualitario en el hogar, así como para reforzar en los padres la protección hacia sus hijos. 

Consideró, igualmente, que la comerciante que halló a Vayoleth sí merece recibir la recompensa de 20,000 nuevos soles que ofreció la Policía Nacional para quien encontrara o brindara información sobre el paradero de la menor.

"Lo merece el civismo con el que actuó Olinda Ramírez, lo cual es digno de resaltar, por cuanto una persona que termina su trajín del trabajo cierra su puesto y se va; sin embargo, ella tuvo el civismo de interesarse por una niña sola, sin la compañía de un adulto, preguntarle cómo estaba y verificar en las cuadras adyacentes si había una persona que respondiese como familiar", dijo.

Posteriormente, llamó a serenazgo y esperó con ellos hasta que avisaran a la Policía Nacional, agregó la ministra. 

Sobre el niño de 10 años desaparecido el último viernes, cuando fue enviado por sus padres desde Los Olivos a sacar copias en el Centro de Lima, dijo que las pesquisas de la Policía Nacional se iniciaron desde que se tuvo el reporte de su extravío.

"Les daremos todo el apoyo psicológico necesario a los padres del menor. Ayer hablé con los abuelos y les envié un mensaje de serenidad a los padres"