Esta previsión considera que la expansión del Producto Bruto Interno (PBI) por encima de 5.5 en 2014 y 2015, impulsará la demanda de vehículos nuevos porque se seguirá promoviendo la creación de empleo y el aumento de los ingresos de las familias. 

  

Asimismo, el crecimiento de la inversión privada en sectores como la minería y construcción, además del mayor dinamismo de actividades vinculadas al turismo y el comercio impulsará la demanda por autos de carga y comerciales.

Por el lado de la oferta, la apertura de la economía favorecerá una mayor competencia entre marcas debido a la entrada de autos de procedencia asiática (China e India, principalmente) a menores precios. 

La mayor diversidad de marcas y modelos permitirá ofrecer productos más a la medida de los distintos clientes, entre ellos el segmento joven y de lujo, según el reporte. 

También se espera que la red de concesionarios y puntos de venta y post venta (centros de mecánica, mantenimiento y ventas de repuestos) continúe ampliándose, en Lima y provincias. 

La oferta de autos nuevos deberá cubrir el espacio que se generará la menor competencia de autos usados importados a través de las zonas francas (Ceticos), que venció a finales de 2012.

BBVA Research prevé que los aranceles se reducirán gradualmente como resultado de la implementación de los Tratados de Libre Comercio (TLC) con Japón y la Unión Europea lo que tendrá algún impacto positivo sobre los precios de autos.  

A medio y largo plazo, las perspectivas del mercado automotor peruano son positivas y tiene un amplio espacio para desarrollarse, remarcó. 

Refirió que la ejecución de importantes proyectos de infraestructura 

vial que se tienen previstos hará más fluido el tránsito vehicular, principalmente Lima. 

No obstante, advierte que el crecimiento del mercado automotor podría tener dificultarse en el medio plazo de no llevarse a cabo estas obras viales y la construcción de espacios adicionales 

de estacionamientos en las ciudades.